Las calles de Barranquilla: vueltas M

Seis meses es un compás de espera más que razonable para empezar a juzgar la gestión (o la falta de ella) de nuestra alcaldesa Elsa Noguera. Y es que hay que hablar de falta de gestión: * Las calles de Barranquilla, después de un fugaz e inútil reparcheo por la época del carnaval, están completamente reventadas, sin que se sepa de si se tomarán medidas para repararlas. Para cualquiera que haya ido a Medellín, este es un motivo de profunda verguenza, porque sabe que sí es posible que la malla vial de una ciudad esté en buen estado. Los pretextos abundan, la decisión escasea. * Al parecer, la labor de los curadores urbanos es decirle que sí a todo. No de otra forma podrían proliferar bares, discotecas y estaderos reventando música a todo timbal en sectores residenciales. Es lo mismo para el estrato cero como para el siete u ocho. En la carrera 51 con calle 79, los habitantes del sector luchan para que no les embutan más consultorios médicos. En la carrera 46 con calle 82, los poco...